Desmontando mitos
de la violencia
machista

25N: Los derechos de las mujeres siguen a la espera

La violencia de género, en todas sus expresiones, sigue muy presente en la sociedad actual. No sólo eso, sino que los feminicidios, su máxima expresión, siguen en aumento. En 2023, el portal de referencia feminicidios.net contabilizó 103 asesinatos de mujeres en manos de hombres, lo que supuso un aumento del 3% respecto a 2022. Este año, hasta inicios de noviembre de 2024, ya se han contabilizado 84.

Este 25N, desde la Associació in via, entidad de referencia en Catalunya en la prevención y para la erradicación de la violencia de género, queremos denunciar que, actualmente, a pesar de los esfuerzos de los diferentes gobiernos para homogeneizar el abordaje de las violencias machistas en todos los territorios catalanes, las posibilidades de acogida que tienen las mujeres siguen siendo insuficientes, especialmente en el ámbito rural, observándose todavía una fuerte centralización de los recursos.

Por eso, aunque celebramos el nuevo plan nacional contra la violencia de género que ha aprobado el Gobierno, con 32 medidas concretas, entre las que destacamos la apertura de cuatro nuevos SIE, uno en cada demarcación, urgimos a seguir trabajando en esta dirección.

Más allá de esta realidad, también queremos poner el foco de atención en cómo se están destinando los recursos para la emancipación de las mujeres y familias supervivientes de violencia de género. Y es que en la Associació in via somos conscientes de los retos que supone para una mujer o familia rehacer su vida después de haber vivido una situación de violencia machista. No se trata sólo de protegerlas, sino de ofrecerles los recursos residenciales necesarios para que puedan rehacer su vida a todos los niveles y dejar de ser revictimizadas a nivel estructural.

Sobre la revictimización que sufren las mujeres, seguimos exigiendo que éstas puedan hacer efectivos sus derechos cuando se enfrentan a un proceso judicial y, por tanto, que la mirada de género impregne la forma de trabajar de abogados y magistrados, especialmente en territorios alejados de las grandes ciudades, ya que hoy en día en Catalunya contamos con juzgados que no facilitan la protección de las mujeres.

Por otro lado, sirva este manifiesto para visibilizar, un año más, que la infancia y la adolescencia son también víctimas y supervivientes de violencia de género, mereciendo toda nuestra atención y todos nuestros recursos, porque son especialmente vulnerables y porque defender sus derechos es defender un presente y un futuro equitativo, igualitario e inclusivo.

Por último, queremos levantar la voz para interpelar a las autoridades y a la comunidad internacional para que actúen de forma urgente en la defensa de los derechos de las mujeres y niñas que se encuentran multiagredidas y silenciadas en países como Afganistán, Irán o el Líbano, o que siguen siendo violadas, utilizando la violación como arma de guerra, en territorios que se encuentran en conflicto armado. Porque son nuestras hermanas, y si agreden a una, nos agreden a todas, y, de momento, nos están agrediendo de forma sistemática, por el hecho de ser mujeres.