Ni príncipes ni princesas, lectoras
Los libros nos curan, nos ayudan a vivir. Es una frase que se ha puesto de moda. Bienvenida sea esta moda. Sobre todo, en los días que preceden y siguen a Sant Jordi.
Sant Jordi es la leyenda del dragón y de la rosa. San Jordi mata al dragón y regala la rosa a la princesa cautiva. En la Asociación in via, que queremos dar futuro a tantas personas vulnerables, hemos hecho nuestro el lema «ni príncipes, ni princesas», que nos lleva a dividir el mundo en personas activas y personas pasivas. Los queremos a todos en marcha, buscando sus propias oportunidades. Por ello, las rosas y los libros son el mejor emblema de San Jordi, una de las fiestas más bonitas de Cataluña. Regalar una rosa y un libro a las personas queridas es dar alegría, porque regalamos todos los sentidos. Fíjense, regalamos visiones en colores, olores de campo y de papel, de oído cuando pasamos las hojas, sensaciones táctiles y, por qué no? de gusto, lamiendo un poquito un pétalo o una hoja … eh! Con cuidado, no vaya a ser que el canto de las hojas de libro estuviera envenenado, como en la peli-libro El nombre de la rosa.
Detengámonos un poco a pensar en el libro, el menos efímero del binomio rosa-libro. En los libros encontramos las historias que nos cuentan nuestra vida. Hay que buscar cuál es nuestro libro. Mientras buscamos, vamos leyendo otras vidas que nos explican el mundo. Cuanto más removemos en la lectura, más sabemos porque nos ha pasado lo bueno y lo malo. Lo que queremos recordar y lo que queremos olvidar, una vez lo hemos asumido. Leyendo nos preparamos para saber elegir lo que nos gusta, lo que nos hace felices.
En la Asociación invia reivindicamos una fiesta de personas que leemos, para construir un futuro sin príncipes ni princesas. Con personas libres, empoderadas y solidarias. En este camino estamos: in via.
Manolita Sanz, Junta de la Asociación invia